La optimización de los consumos energéticos no es más que garantizar el uso adecuado de los recursos energéticos, de manera que por un consumo menor al acostumbrado, se garantice la misma calidad en el servicio. Una manera sencilla de explicar esto, es imaginarnos que disminuimos el consumo energético mensual en nuestras viviendas sin afectar las costumbres o calidad de vida que llevamos en nuestro hogar. Para lograr tal disminución sobre el consumo mensual, los fabricantes de equipos de toda índole han mantenido una evolución constante en sus tecnologías, desde equipos de la línea blanca doméstica, hasta grandes motores o maquinas industriales, todos luchando por ser el más eficiente en el mercado.
Emprender no es solamente una palabra en el vocabulario utilizada para describir una actividad o una acción particular, tampoco es una solución mágica por medio de la cual desaparezcan sus problemas económicos, muchos menos significa ser anárquico y hacer lo que uno quiera.
El Sol lleva millones de años supliendo al planeta de energía, es nuestra gran estación de combustible gratuito, la gran mayoría de los procesos que se llevan a cabo en la naturaleza requieren de un consumo de energía que siempre se ha visto cubierto gracias al potencial del astro rey. La interacción entre la radiación solar que calienta al planeta, ha derivado en distintos procesos como lo son los vientos, las mareas o el mismo crecimiento de vegetales y animales que con el pasar de millones de años derivaron en combustibles fósiles.
Es difícil emprender en Venezuela: multitud de jóvenes emigran en busca de oportunidades y un futuro mejor, y llegar a buen término en el emprendimiento de un negocio, y sobre todo tecnológico, se puede ver como algo realmente complicado.
Muchos emprendedores coinciden en que si hay algo fundamental a la hora de poner en marcha tu negocio es darse a conocer, hacerse un nombre en el mercado. La era digital ha abierto un amplio abanico de posibilidades que le permite a las nuevas empresas llegar a su público más rápido, darse a conocer con mayor facilidad, acercar su producto o servicio a un publico específico, iniciar las bases de una comunicación fluida y ágil con clientes, entre otros tantos beneficios.
Tecnología, esa palabra que esta muy de moda en la actualidad, muchos de cierta forma le temen, otros no pueden vivir sin ella, algunos la emplean como amenaza, pero casi todos nos hemos acostumbrado a ella. Sin embargo, sea cual el punto de vista que se tenga, lo cierto es que lo que esta palabra implica, talla poco a poco la forma en que coexistimos todos con nuestro entorno, es decir, con nuestro planeta.
En la ejecución de un diseño o construcción de una obra es fundamental la fase de conceptualización y dimensionamiento de las instalaciones que formarán parte de la misma, es trivial para los constructores la necesidad de realizar este dimensionamiento desde el punto de vista arquitectónico y para cada una de las especialidades “tradicionales” o comunes, como por ejemplo sistemas de suministro de energía, iluminación, climatización, sistema de bombeo, ventilación forzada, protección contra incendio y otros subsistemas considerados como “básicos”, no obstante esto no ocurre en lo que muchos gerentes de obra denominan tecnología y que nosotros identificamos como integración o simplemente gestión. Cada vez es más común que los constructores identifiquen la necesidad de contar con la documentación que les brinde una referencia de las exigencias mínimas que deben cubrir cada uno de los subsistemas en lo que respecta a este tema.
A partir de octubre de este año todos los proyectos que postulen a la certificación LEED, deberán implementar los parámetros establecidos en la versión LEED v4.
El Internet de las cosas (IoT, internet of things), tal como ya había descrito el ingeniero Eduardo García en un artículo de blog anterior, y tal como su nombre nos lo ilustra, se trata de objetos cotidianos con capacidad de conexión a la red de redes, esa misma que nos ha facilitado nuestras labores diarias, nos permite acercarnos a propios y extraños, y nos brinda nuevas formas de tener herramientas de aprendizaje a nuestro alcance. Ello crea una nueva forma de recolectar e intercambiar información, lo cual conlleva a una integración de todos estos elementos de un sistema particular, siendo de utilidad para mejorar la eficiencia, la seguridad, el confort, facilitar el cumplimiento de nuestras labores y satisfacer nuestro espíritu curioso y creativo.
El gran impulso tecnológico al que solemos referirnos bajo el término Big Data ha revolucionado el entorno empresarial. Existe una demanda generalizada de sistemas con una inteligencia avanzada (IA), equivalente a la de un humano, que sean capaces de procesar esos datos. Esto está ocurriendo en prácticamente todos los sectores, pues es rara la actividad empresarial o de la administración pública que no se pueda beneficiar de un análisis inteligente y automatizado de los datos.