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¿Qué es una empresa? Seguro muchos cuentan con algunas respuestas a esta pregunta. Todas son totalmente válidas, pero me gustaría dar mi visión, así como compartir algunos puntos que considero clave para complementar mi respuesta.

Generar ideas es un proceso natural del ser humano, algunas son originales, otras solo buscan la continuidad. En su origen son todas buenas y no es sino hasta el proceso de retar a esa idea que esta comienza a filtrarse. Pasar del plano creativo al mundo real es un proceso complejo, comprender y valorar las implicaciones de su aplicación es el paso más difícil, porque en muchos casos dependerá de cuan enamorado se esté de la idea para tener la voluntad de ejecutarla.

Por ello, no son las máquinas, sino las ideas lo que realmente mueve al mundo (Víctor Hugo). Muchas terminan en una empresa, aplicando el concepto general, es una acción que conlleva un esfuerzo. Entonces, ese concepto de trabajo es lo que permite materializar una visión que eventualmente se convierte en una empresa, bajo el concepto mercantil.

Todos podemos trabajar solos, caer o triunfar, aprender de cada paso que damos y sumar experiencia valiosa, al final del día lo que importa es lograr el objetivo, ¿cierto? Los puristas pensarán que sí, pero considero que la gran pregunta debe ser: ¿ha sido un viaje interesante? Mi respuesta sincera es que afrontar esto en compañía es más entretenido y no porque sea un circo (que en sus inicios muchas empresas lo parecen) sino porque es un viaje muy enriquecedor.

Los seres humanos somos personas de hábitos y costumbres, nuestra naturaleza nos lleva a agruparnos, está marcado a fuego en nuestro ADN ser sociables, era una forma de sobrevivir, de adaptarnos a nuestro entorno para cumplir con la máxima de la teoría evolutiva basada en la supervivencia del más apto. Por eso empezamos en los árboles, luego pasamos a las sabanas, de allí a las cuevas, después a asentamientos que dieron origen a poblados y finalmente esos pueblos crecieron hasta formar los grandes centros urbanos de hoy en día.

Una empresa es un ente vivo, en el cual todos deben remar en una misma dirección para alcanzar esa visión original que unió sus caminos en una primera parte, ella puede ser sencilla o ambiciosa, cambiar con el tiempo, pero siempre debe estar allí, tan clara como el agua. Un común denominador en la ruptura de empresas es no contar con una visión clara, esa neblina permite que los objetivos globales e individuales no estén alineados y por ende todos quieren remar a su ritmo, sin coordinación eventualmente se termina navegando en círculos hasta que por el desgaste sistemático y a todos los niveles van abandonando la nave y esta se va a pique.

Trabajar en equipo es un arte, no es nada fácil compartir y delegar es muy complejo, en ambos casos la clave es la confianza. La microgerencia es algo muy común al inicio de las operaciones y esa tendencia suele extenderse hasta que se gana la confianza por medio del trabajo bien hecho. Es una negociación tácita entre todos los integrantes de grupos de trabajo, esto hace que se filtren y perfeccionen con el paso del tiempo a medida que se alcanzan cuotas más elevadas de confianza. Puedes contar con alguien con un talento natural para hacer alguna actividad, pero con cero nivel de esfuerzo o auto superación, en el cien por ciento de los casos, esa persona se filtrará sola y será superada por alguien que cuente con el foco, dedicación y disciplina necesarios. Por algo siempre se dice que la energía tapa los errores.

La pasión es algo clave en toda actividad que se realice, más allá de que un trabajo, alianza, apoyo o colaboración tenga un trasfondo comercial, esa no debe ser la única motivación para enfrentar un reto diario. Sencillamente eso va a hacer que alguien se aburra en algún momento, esto es independiente de la remuneración que se obtenga y cuando eso pasa es significativamente notable los valles de productividad que se generab. Mas allá de una actitud positiva hacia el trabajo, esto pasa por saber imprimir en cada colaborador la llama de la idea original, de la visión y así crear un sentido de pertenencia. Todas las partes son importantes, pero no necesariamente indispensables. 

Volviendo a la idea inicial,  una empresa es más entretenida en equipo porque todos los integrantes de ese grupo de trabajo se nutren de las experiencias conjuntas. Cuando se está solo, la experiencia obtenida depende solo de tus acciones, en cambio al estar en equipo las fuentes de experiencia sobran y, tanto positivas como negativas, todo suma. Esto trae otro factor a la ecuación, ni más ni menos que el tiempo. ¿Qué tan rápido es posible alcanzar un objetivo? ¿Cuánto tiempo tengo disponible? ¿Cuál es mi plan de vida? Muchas interrogantes que deben ser analizadas al momento de elegir por qué camino apostar.

Si has estado atento podrás notar que una empresa puede compararse con otras instituciones comunes para todos, una familia, un matrimonio, un equipo deportivo y pare de contar, siempre existirán las referencias comunes que resuenan con cada uno de nosotros.

Pero aquello que puede hacer la diferencia en el recorrido pasa por estar claro en la ruta, saber elegir a los compañeros del viaje, compartir una visión, llegar a conocerlos bien para crear lazos de confianza, entender realmente qué te motiva y aviva la pasión por lo que haces y, finalmente, comprender que el tiempo es importante, cada acción que ejecutamos conlleva a una reacción sobre el tiempo que invertimos en materializar las ideas.

Quiero cerrar con un agradecimiento especial a todos nuestros colaboradores en INNOTICA, a los que iniciaron esta aventura, a los que están actualmente apoyándonos  y a los que nos acompañaron en algún punto del viaje (este artículo se publica un día antes de cumplir siete años como empresa). Nuestra experiencia se nutre del aporte de todos. Más allá de momentos buenos o malos, somos un equipo que comparte el reto y las satisfacciones de un trabajo bien ejecutado.

Realizado por:
Jonny Cabrera
Director de Operaciones
jcabrera@innotica.net
@jonjocaza
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* Este blog es de divulgación, por lo tanto Las opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan la opinión de la empresa.